miércoles, 25 de noviembre de 2009

U.N.R : Un Negocio Redondo

El Rector Darío Maiorana y los Consejeros Superiores de la UCR y Franja Morada aceptaron los fondos mineros provenientes de La Alumbrera

Finalmente, en la sesión del Consejo Superior de la UNR del día 24 de noviembre, fue tratado el asunto relativo a los fondos provenientes de la empresa minera Bajo La Alumbrera. Allí, el bloque que apoya al Rector Darío Maiorana integrado por sectores provenientes del Radicalismo, el Kirchnerismo y la Franja Morada votó no hacer lugar al pedido de rechazo de estos fondos.

Por lo demás, desconociendo lo resuelto en la sesión ordinaria del 15 de octubre de aquél órgano, el asunto fue tratado sólo desde la dimensión técnico-legal en una de las comisiones del Consejo Superior. Así se desconoció que el propio cuerpo había resuelto tratar el tema atendiendo a otras facetas fundamentales, tales como la dimensión ética, el condicionamiento del conocimiento académico o el vínculo de las instituciones universitarias con el mercado. Y al mismo tiempo no se convocó al Consejero Superior Estudiantil de la agrupación Santiago Pampillón-el grito (HyA) a la citada comisión. Esto representa un nuevo atropello por parte de Maiorana que adecua las normas institucionales a sus intereses políticos.

De este modo, Maiorana consiguió imponer la postura del Consejo Interuniversitario Nacional (que reúne a todos los Rectores de las distintas UUNN) de aceptar estos fondos sin cuestionar su origen.


La resolución del Consejo Superior desconoce la opinión de otras unidades académicas de la UNR

A pesar de que sólo el Consejo Superior de la UNR puede formular resoluciones con entidad jurídica, otras casas de estudio de Rosario se han expresado en sentido opuesto a la aceptación de estos fondos. Han rechazado los fondos provenientes de la empresa Bajo La Alumbrera las Facultades de Ingeniería y Agrimensura, la Facultad de Psicología y la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales. Cabe agregar que la Universidad Nacional de Río Cuarto rechazó estos dineros.
http://santiagopampillonpsicologia.blogspot.com/2009/11/universidad-toxica.html

A pesar de los reclamos, la UNR aceptó el fondo minero


El Consejo Superior de la Universidad Nacional de Rosario resolvió aceptar los cuatro millones de pesos que envía el Poder Ejecutivo Nacional procedentes de la mina Bajo de la Alumbrera, cuestionada por los consejeros estudiantiles que denuncian a la empresa por contaminación. Para las autoridades el reclamo es "improcedente"
El mismo reclamo contra la minera se dio en la UBA, que también aceptó el fondo.
El mismo reclamo contra la minera se dio en la UBA, que también aceptó el fondo.

El Consejo Superior de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) resolvió aceptar el fondo de cuatro millones de pesos que envía el Poder Ejecutivo Nacional procedentes de la mina Bajo de la Alumbrera, una empresa cuestionada por los consejeros estudiantiles que la denuncian por contaminar con su modo de explotación a cielo abierto.

El tema, que estaba en el orden del día del Consejo Superior, fue abordado por los consejeros superiores y luego de ser analizado obtuvo la aprobación de la mayoría que adoptó la posición tomada por la Comisión de Interpretación y Reglamento que planteaba "desestimar el pedido de rechazo de los fondos" que provienen de la ley de minería "por improcedente".

La moción aprobada por el Consejo Superior fue "rechazar el pedido de no aceptar los fondos por improcedente y constituir una comisión para que proponga al cuerpo una propuesta de cambios de cuestiones medioambientales, y todas las acciones que la Universidad tiene que hacer para modificar la situación actual".

El rector Darío Maiorana, quien es a su vez presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), informó al Consejo Superior que desde ese organismo se viene trabajando para desarrollar leyes para el cuidado del medio ambiente.

Este martes, estudiantes de distintas facultades de la UNR se hicieron presentes en la reunión del Consejo Superior para solicitar formalmente que los directivos rechacen los fondos procedentes de las ganancias obtenidas por la empresa minera Bajo de la Alumbrera.

La distribución de estos fondos para las universidades nacionales está fijada por ley y, en el caso de la UNR, asciende a cuatro millones de pesos. Sin embargo, los estudiantes los rechazan porque la empresa minera trabaja a cielo abierto y aseguran que provoca la contaminación no sólo de la tierra y el agua, sino también del aire en la provincia de Catamarca donde lleva a cabo sus actividades. Incluso, señalaron, los directivos están acusados de lavar dinero.

El mismo reclamo de un grupo de estudiantes con el apoyo del premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, se dio en agosto pasado en la Universidad de Buenos Aires (UBA); con idéntico resultado.

La empresa cuestionada

El proyecto Bajo de la Alumbrera está compuesto por cinco instalaciones situadas en tres provincias de la República Argentina: Catamarca, Tucumán y Santa Fe.

La mina, la planta de procesamiento y las oficinas centrales de administración, están situadas en Bajo de la Alumbrera, provincia de Catamarca. A partir de allí, un mineraloducto de 316 kilómetros de longitud para transporte de concentrado, se extiende desde Catamarca hasta la provincia de Tucumán. La planta de filtros y las instalaciones ferroviarias están ubicadas en Cruz del Norte, Tucumán; y la terminal de transferencia de carga y puerto se encuentran en Puerto General San Martín, Santa Fe.

Además, cuenta con oficinas de apoyo situadas en San Miguel de Tucumán, San Fernando del Valle de Catamarca, Puerto General San Martín y Buenos Aires.

http://www.rosario3.com/noticias/noticias.aspx?idNot=61370

martes, 24 de noviembre de 2009

DIPUTADOS SANTAFESINOS A FAVOR DE LA MUERTE

Ante el próximo tratamiento en el recinto de Diputados de las modificaciones a la Ley 11.273 de Fitosanitarios, donde se fumigarán venenos hasta 100 metros de las poblaciones, el Centro de Protección a la Naturaleza considera necesario expresar:

En notas anteriores, hemos expuesto que el actual modelo agrícola produce prioritariamente soja, (19 millones de has sembradas con soja así lo confirman) la que no es consumida en la Argentina y que se destina para la exportación como poroto, harina, aceite y biocombustibles. Con el avance de las fronteras agropecuarias, se han ido nuestros bosques, envenenado nuestros ríos, exterminado nuestra biodiversidad y acorralado a la población en las villas miserias. Como consecuencia de la pérdida de los cinturones verdes periurbanos y la eliminación de la rotación de los cultivos, los argentinos perdimos la posibilidad de producir los alimentos que a diario ocupaban nuestras mesas. Pero no sólo eso: cuando se habla de plantar soja hasta en las macetas y en las plazas, se está hablando de establecer una extraña convivencia entre los venenos y la población.


En el otro extremo, como espejitos de colores, se nos muestran los números de lo que recauda el gobierno nacional y su redistribución con el Fondo de la Soja a las provincias, municipios y comunas. Debemos recordar que ese Fondo estaba destinado originalmente para obras de infraestructura y equipamiento de salud y educativo pero una modificación posterior permitió su desvío y uso para el pago de sueldos y servicios de las administraciones gubernamentales con “problemas de caja”. Esta situación unifica en un solo bloque, por necesidad, a las políticas nacionales con las provinciales.


De todo ésto, surge que este gobierno provincial necesita de una ley que esté supeditada a los intereses económicos de poderosos grupos económicos locales y transnacionales, así como a una necesidad de caja, antes que a la salud de la gente. Por ello ejerce presión sobre sus diputados adictos quienes en una rara alianza apoyan el dictamen de minoría de los diputados de signo político opuesto. Tampoco resulta raro si se observara el origen de muchos de esos diputados que son propietarios de miles de hectáreas de soja o que provienen de la dirigencia ruralista y que actúan corporativamente apoyando estas decisiones, aún cuando esta acción esté reñida con la ética.


Para las modificaciones a la Ley 11.273, se debieron soslayar investigaciones precisas de destacados científicos argentinos sobre la toxicología de los venenos utilizados; dictámenes de la Justicia donde se aplica el Principio Precautorio y se establecen distancias entre los cultivos y los vecinos; cientos de reuniones realizadas con las comunidades afectadas. Incluso se dejó de lado la nota N° 5709 de la Defensoría del Pueblo, remitida a cada bloque de diputados, donde exponen argumentos contundentes a favor de los 300 metros entre los tóxicos y la gente.


Las organizaciones que estamos luchando por establecer un margen de seguridad alrededor de las poblaciones hemos propuesto que estas áreas periurbanas (cinturones verdes frutihortícolas de proximidad) además de establecer una distancia entre los venenos y la gente, sean áreas de producción para los alimentos que forman parte de la cultura alimentaria argentina. Además, no habrá hospitales ni centros de salud que puedan abastecer la demanda de una población enferma en constante crecimiento, tal como hoy se corrobora en los efectores de salud de nuestra provincia.

Por lo que hacemos responsables a los diputados que promovieron y aprobaron estas modificaciones y que condenan a nuestras comunidades a un genocidio silencioso y que afecta hasta la enfermedad y la muerte a miles de ciudadanos y ciudadanas.


Comisión Directiva.

Centro de Protección a la Naturaleza

Santa Fe, 24 de noviembre del 2009.-


REDUZCA-REUTILICE-RECICLE # PARE DE CONSUMIR !!
RED NACIONAL DE ACCION ECOLOGISTA.
www.renace.net

MARTES 24/11 TOD@S AL CONSEJO SUPERIOR

Fondos Mineros en la Universidad Nacional de Rosario

El Rector Darío Maiorana pretende dilatar el tratamiento de los fondos mineros provenientes de La Alumbrera

Tras 40 días de su última sesión, el Rector ha convocado al Consejo Superior de la UNR (de acuerdo al Reglamento de funcionamiento de este órgano, se debe sesionar cada 14 días). En aquella sesión del 15 de octubre, el Consejo Superior resolvió debatir la problemática de los fondos provenientes de la empresa minera La Alumbrera-YMAD (Yacimientos Minerales Aguas de Dionisio) en sus comisiones. No obstante, en el intervalo entre ambas sesiones, el tema no ha sido tratado por ninguna comisión ni tampoco figura como punto del temario de la próxima reunión del Consejo Superior.

Esta situación deja de manifiesto la voluntad política del Rector Darío Maiorana y el arco político que lo respalda (UCR-Franja Morada y sectores kirchneristas) de evitar resolver sobre el asunto. O, en el mejor de los casos, dilatar su tratamiento para ser discutido en circunstancias poco favorables –como son las fechas de exámenes- para la participación de la comunidad universitaria.

Preocupa aún más esta situación si se atiende a las diversas declaraciones del Rector en las que ha expresado que se debe cumplir con lo que establece la ley Nacional 14771. Cabe recordar que el texto de esta ley del año 1958 -que regula la explotación del Yacimiento Minero Aguas de Dionisio- establece (en su artículo 18 inciso c) que las Universidades Nacionales recibirán el 20% de las utilidades. Sin embargo, la ley no indica ningún tipo de sanción para las instituciones que se abstengan de hacer uso de dichas utilidades.

De este modo, Maiorana sigue sosteniendo la postura del Consejo Interuniversitario Nacional (que reúne a todos los Rectores de las distintas UUNN) de aceptar estos fondos sin cuestionar su origen. Aunque, a sabiendas de los costos políticos que han tenido que pagar las autoridades de otras instituciones académicas por defender esa definición, pretende evitar el tratamiento público del asunto.

La falsa antinomia: Legalidad vs legitimidad

En nombre de la ley, las autoridades de la UNR defienden el uso de los dineros provenientes de La Alumbrera, una explotación minera a cielo abierto. Una medida que, en virtud de la naturaleza de la explotación minera a cielo abierto y su impacto negativo sobre el medio ambiente, es claramente ilegítima pues contradice los valores éticos que deberían ser baluartes de la educación pública como lo son la autonomía y crítica del pensamiento o el respeto por el medio ambiente.

A su vez, las autoridades de la UNR, con el Rector Maiorana a la cabeza, ignoran otros aspectos de la misma legalidad que dicen respetar. Desconocen los alcances del artículo 41 de la Constitución Nacional (referido a los derechos ambientales), así como también pasan por alto el marco de acción que permite la autonomía de las instituciones universitarias a la hora de administrar sus bienes y recursos.

Y por encima de todo, el Rector Maiorana soslaya el aspecto fundante que atraviesa la cuestión de los fondos mineros. A saber, cuál es el proyecto educativo estratégico que se traza cuando se tratan estos asuntos: o una educación superior condicionada por la lógica mercantil (que en el caso particular de La Alumbrera enseña palmariamente su faz más gravosa) o una educación autónoma respecto al mercado que se sustente en los valores de la crítica y el servicio a los sectores más necesitados.

Los fundamentos del rechazo

La actividad minera a cielo abierto produce un impacto ambiental y económico que la convierte en una forma extractiva nada sustentable para la población. Sólo genera enormes ganancias para empresas multinacionales y para sus personeros políticos locales. La minería a cielo abierto demanda poca mano de obra pero derrocha enormes cantidades de bienes naturales y otra clase de insumos. Por ejemplo, La Alumbrera consume el 87% del consumo total de energía de la provincia de Catamarca y 4 millones de litros de agua por hora, o sea 100 millones de litros de agua dulce por día. Entre los impactos negativos de este emprendimiento, cabe indicar el uso indiscriminado y la contaminación del agua, la alteración de la geografía y con ello del ecosistema, por mencionar algunos.

Desde la agrupación Santiago Pampillón-el grito (Humanidades y Artes), entendemos que recibir el dinero proveniente de La Alumbrera , así como establecer convenios con la misma, no sólo condiciona la objetividad de la producción científica al interior de las universidades públicas y su rol de contralor, sino que las convierte en cómplices del saqueo de nuestros bienes naturales nuestros ecosistemas. Un silencioso eco-genocidio cuyo impacto profundo repercutirá en futuras generaciones pero que ya se hace sentir en el presente.

No obstante, este tema plantea un debate más general y estratégico que trasciende la aceptación o no de estos fondos puesto que pone en discusión cuál es el modelo de universidad pública por el que se apuesta. En ese contexto, consideremos necesario poner en cuestión este modelo de educación universitaria tributario en sus núcleos fundamentales al neoliberalismo. Y a su vez, construir una Universidad Nacional dirigida hacia los sectores populares, que abogue por un país soberano y aporte a un desarrollo sustentable que respete el medio ambiente.
http://santiagopampillonpsicologia.blogspot.com/2009/11/martes-2311-tods-al-consejo-superior.html

jueves, 19 de noviembre de 2009

GLIFOSATO-CONDENADOS EN EL AIRE


Comiamos debajo del ala del avión donde están las barras que gotean el veneno. Para nosotros era normal jugar con el dedo en los chorritos de veneno que caían en el piso mientras hablábamos y tomábamos mate. Por lo general comíamos pan de miga que usábamos para el fiambre que como un secante absorbía todo lo que teníamos en las manos. El agua que usábamos era del tanque de los molinos australianos que hay en los campos, con todo el riesgo que eso conlleva para el resto de la población circundante a ese molino. Nosotros sacábamos el agua del molino más cercano, sacábamos el agua con la misma manguera por la que minutos antes pasaba el veneno, la sumergíamos ahí y contaminábamos todo.

No les molesta que los llamen fumigadores. Su trabajo es el de subirse al aeroplano y derramar sobre campos y poblaciones el letal veneno con nombre propio: glifosato. Muchos de estos pilotos tienen su conciencia intranquila y su salud quebrantada. “Yo realizaba trabajo aéreo y mis desencuentros y discusiones con capataces y mi propio patrón carentes de sensibilidad eran constantes. Me negaba a fumigar a los banderilleros, que por lo general siempre eran niños o adolescentes, sin que antes se les proveyera de capa impermeable con capucha para evitar que los productos químicos utilizados, que eran extremadamente tóxicos los perjudicara. Tuve que escuchar respuestas a mis pedidos, como que eran los ‘hijos de los peones’ o que si yo era piloto o abogado defensor, a lo que contestaba que simplemente no quería ser asesino. Muchas veces, aunque a regañadientes, aceptaban mis sugerencias”, contó Eduardo Gimenez.

“Mucho se dice que el GPS hace innecesario al banderillero, pero esto es otra mendacidad. Nadie puede pensar en navegar una aeronave por instrumentos a baja altura. Yo he sido usuario de navegadores del mismo tipo que se emplea para fumigar y los errores que tiran, más el tiempo que tardan en orientarse, los hacen obsoletos para este uso. Sirven para encontrar el campo o la pista, para saber cuanto falta de recorrido y gracias”, agregó Arturo Avellaneda, que escribe para el blog "Permahabitante", que fué intervenido o "fumigado", como él prefiere denunciarlo.

Al testimonio de ambos se sumó el de Fabián Tomasi, otro “fumigador” que lleva en su cuerpo la marca del veneno.

Todos manifestaron que el SENASA permite las fumigaciones respetando las leyes y que en relación a los afectados tanto unas como otro “se hacen humo".

En videoconferencia con la ingeniera agrónoma Patricia Roccatagliata -en el marco de la Jornada sobre Agroquímicos que se desarrolló el pasado 30 de octubre en el Colegio de Ingenieros de Buenos Aires- Tomasi relató desde su Entre Ríos natal, en la localidad de Basavilbaso, el drama que le toca vivir y hace un llamado para que se termine lo que califica como “un genocidio”.

- Hola Fabián. Buen día. ¿Nos contás cuando empezaste a fumigar con los aviones?

En el 95-96. Era apoyo terrestre preparando todos los productos, sin ningún curso previo para entender que estaba manipulando. Nos reíamos de las fotos de las etiquetas, esa gente que mostraba tipo astronautas, nosotros nunca tuvimos la posibilidad de vernos así, por ignorancia, subestimando el desastre.

- ¿Qué medicación te están dando?

Aplicaciones que me donó el Dr. Kaczewer, terapia y acupuntura alemana, con su discípulo de Entre Ríos, porque antes no tenía ningún ingreso, no tenía jubilación. Agradezco a Asamblea por la Vida, Tenaglia, Guillermo Torres, Romano, que han hecho lo posible para que yo hoy este hablando con ustedes.

- ¿Como es tu dieta?

Yo soy diabético, partamos de esa base. Era mas fácil tratarme así, para minimizar el problema de los agrotóxicos. Me trataron un año por diabético, el Dr Lezcano, que hace años está luchando contra esto, todo estaba bien… hasta que un día empecé a perder los músculos, disminución de la capacidad pulmonar, el cuerpo denotaba otra cosa y el médico me dice: “sacate la remera porque noto en vos algo raro que no es normal… hace un año que estamos errados, la diabetes no es, acá hay algo mas. La diabetes esta controlada" Con la exposición que tuve durante seis años con los venenos, potenciado por mi diabetes que disminuye mi capacidad de reacción, lo que yo tengo es una gran intoxicación por agroquímicos, se diga lo que se diga. De no ser así que alguien me lo demuestre.

Trabajamos con productos químicos en cueros y short y a veces descalzos. Parábamos para comer al mediodía lavándonos las manos con agua que llevábamos en un carrito atrás de la camioneta. Comíamos pan de una conservadora con hielo que almacenábamos en una caja atrás junto con los agroquímicos. ¿Se entiende?

- Acá se están horrorizando…

Comimos venenos durante toda la vida. Cabe destacar que algunas veces que íbamos a trabajar al campo llevábamos maestras rurales porque las conocíamos, le hacíamos lugar entre los productos y se sentaban en las cajas de la camioneta, entre los venenos, a 40-42 grados y ellas sentadas ahí. Los envases se hinchaban por el gas y ellas apoyadas ahí, sobre ese veneno tomando mates. Hay que ser concientes que la ignorancia mata más que el silencio…

- Totalmente…

Yo creo que acá hay muchos culpables y muchos cómplices. En esto me aconsejaron que no hable de política, pero todo esto es un poco de política.

- Háblanos del tema de los médicos, de como la medicina minimiza en todos lados y este acostumbramiento de que los químicos no hacen mal y que total es una cultura general que no pasa nada…

En el hospital publico donde voy en mi ciudad me tratan hasta el día de hoy por diabetes porque no saben distinguir cual es mi problema, esto es algo nuevo el medico común, sin desmerecer su labor, no lo interpreta. Hasta ahora mi historia clínica figura que soy diabético y me tratan como tal cada vez que voy al hospital... no he conseguido más allá de un montón de intervenciones quirúrgicas, para limpiarme las articulaciones, para sacarme el calcio que mi cuerpo forma alrededor del veneno. Nunca pude hacer biopsias de eso o se perdieron… o creo que nadie quiere dilucidar cual es realmente mi problema…

- ¿Como era su trabajo?

Trabajamos al rayo del sol en pistas improvisadas en el campo. Comíamos debajo del ala del avión donde están las barras que gotean el veneno. Para nosotros era normal jugar con el dedo en los chorritos de veneno que caían en el piso mientras hablábamos y tomábamos mate.

Por lo general comíamos pan de miga que usábamos para el fiambre que como un secante absorbía todo lo que teníamos en las manos. El agua que usábamos era del tanque de los molinos australianos que hay en los campos, con todo el riesgo que eso conlleva para el resto de la población circundante a ese molino. Nosotros sacábamos el agua del molino más cercano, sacábamos el agua con la misma manguera por la que minutos antes pasaba el veneno, la sumergíamos ahí y contaminábamos todo.

- ¿Alguien les dijo alguna vez de los riesgos que eso significaba?

A nosotros nunca nadie nos explicó la calidad del agua, lo aprendí después. Usábamos una media de mujer, una can-can sobre la boca del pico para que no pase el verdín que tape los picos a la barra del avión. Ese era el único tratamiento que le hacíamos al agua. Y muchas veces he sido “banderillero” que aunque se lo nieguen a la doctora (Graciela) Gómez. Se que hasta ahora lo siguen haciendo por una cuestión de practicidad. Hay muchos pilotos de aviones que no saben usar los GPS, por lo tanto es mas fácil poner un empleado en el campo con una bolsa en el lote marcando y por lo general uno se agacha para no perder tiempo, nos agachábamos cuando nos caía esa lluviecita en el lomo, que era veneno, pero nosotros nos poníamos contentos y agradecíamos al piloto porque nos refrescaba.

- Muchas gracias Fabián…

Una última cosita, ingeniera. Aquellos que han tenido la suerte de estudiar para saber aplicar esto, solamente les pido por mi y por todos los afectados que son mas de dos millones que de una vez por todas pongan conciencia que tarde o temprano esto nos va a matar a todos.

Le pido a Dios que interceda con esta gente; me estoy refiriendo a los ingenieros agrónomos, que creo que ahí hay muchos. Por favor sean sensatos en lo que tratan de explicar y que de una vez por todas nos ayuden porque nos están matando, tal vez sin querer porque no lo comprenden. Que se haga como se haga esta actividad va a generar muerte... esto es un genocidio.

Por favor, aquellos que estudian para esto nos den la posibilidad de seguir viviendo porque creo que si estas reuniones se hacen es porque alguien esta entendiendo algo. Por favor, por todos los nenes que nacen, que les permitan vivir, hagan lo posible de salvar esas vidas. Nadie dice que se deje de hacer la actividad agropecuaria, pero tratemos de formular nuevas expectativas y que nadie nos imponga nada. Que ningún país disponga que es lo que tenemos que hacer con nuestro campo para poder volver a ser el granero del mundo que alguna vez fuimos.

Dra. Graciela Gomez, Ong Ecos de Romang - Noviembre de 2009

jueves, 5 de noviembre de 2009

LA DEPREDACIÓN ICTICOLA EN LA CUENCA DEL PARANÁ


El PARANÁ se muere. Las grandes represas, la contaminacion y la pesca indiscriminada destruyen segundo a segundo el sistema hídrico del cuarto río del mundo, una de las mayores reservas de agua y alimento del continente desaparece......

Organizado por la Comisión de Medio Ambiente del Colegio de Abogados y el Centro de Protección a la Naturaleza, el jueves 5 de noviembre a partir de las 19hs., se llevará a cabo el panel

La Depredación Ictícola en la Cuenca del Paraná”.

Contará con la presencia del Dr. Nestor Baldacci, abogado, secretario de la Fundación Activa de la ciudad de Santa Fe, la Dra. Estela Mendez Castells del Colegio de Abogados de Entre Rios y del Dr Claudio Baigún, investigador independiente del Conicet, Master en Ciencias Pesqueras y Doctor en Ciencias Biológicas. Actualmente dirige el Laboratorio de Ecología Pesquera del Instituto Tecnológico de Chascomús.

Esta actividad se realiza en el marco de un ciclo de conferencias organizado por ambas instituciones.

El panel se realizará en el salón “Gregorio Parera” - Casa del Foro, 3 de Febrero 2761, Planta Baja, siendo la entrada libre y gratuita. Al término de la misma, se entregarán certificados de asistencia.

Para más datos, comunicarse a :

Diana Moralejo - 3425023344

Carlos A. Manessi - 3426145532

MONSANTO= PLAGA GLOBALIZADA. VEAN LO QUE ESTÁ PASANDO EN LA INDIA